En la Catedral San Fernando Rey desde donde parten las Calendas, hay sendos nichos, uno alberga la imagen de Nuestra Señora del Carmen y el otro la de San Fernando Rey, el último, el santo patrón de la ciudad, y siendo que la su catedral fue dedicada a la Virgen del Carmen, se convirtió así en co-patrona de la diócesis de San Fernando de Apure.
La intención de las Calendas es, llegado el 30 de mayo, salir en procesión con la imagen de San Fernando por la ciudad. De allí que la diócesis junto a Fundacalendas organizan una ceremonia especial para que los calenderos ataviados con sus trajes lo bajen hasta el carro que servirá para acompañar la procesión. La bajada es realizada por los varones que asistan, en general los capitanes y los agricultores. En este acto, los acompañan los abanderados, el Capitán Mayor y la Dama Guía de la Calenda.
El protocolo del acto establece que el Capitán Mayor solicita permiso ante el Guía Espiritual para realizar la bajada de la imagen. Una vez concedido el permiso, el Capitán ordena al grupo quienes inician la tarea.
Esta ceremonia fue concebida por el primer Guía Espiritual de las Calendas, el Padre Franklin Manríquez en 1999, y seguida desde entonces por sus sucesores.